Ama tu ritmo y ritma tus acciones
bajo su ley, así como tus versos;
Eres un universo de universos
Y tu alma una fuente de canciones.
[Fragmento de la poesía “Ama tu ritmo” (1989) de Rubén Darío.]
A pesar del auge que en las últimas décadas han tenido los tratamientos farmacológicos, se hace necesario reclamar justamente el protagonismo de los tratamientos alternativos de la enfermedad. En esta línea, podemos considerar estas jornadas como un esfuerzo por incrementar la oferta de estrategias y terapias alternativas, efectivas y fácilmente accesibles de prevención, tratamiento y reducción de daños. Uno de estos métodos, tanto a nivel profesional como personal, es la musicoterapia.
Perteneciente al ámbito de las terapias creativas y artísticas (arteterapia, danzaterapia, psicodrama y musicoterapia), su utilización se remonta a miles de años atrás, cuando, por ejemplo, los egipcios utilizaban en sus rituales mágicos canciones y sonidos para expulsar los espíritus malignos que existen en el individuo enfermo o, según la biblia, David efectuaba música curativa frente al rey Saúl y otros personajes de la época. Pero ¿qué es la musicoterapia?
Según la Federación Mundial de Musicoterapia “consiste en el uso de la música y/o de sus elementos musicales (sonido, ritmo, melodía, armonía) por un musicoterapeuta, con un paciente o grupo, en el proceso diseñado para facilitar y promover la comunicación, aprendizaje, movilización, expresión, organización, u otros objetivos terapéuticos relevantes, con el fin de lograr cambios y satisfacer necesidades físicas, emocionales, mentales, sociales y cognitivas”.
Su secreto no es otro que la universalidad del lenguaje musical, de ahí que todos podamos, sin necesidad de saber tocar un instrumento, beneficiarnos de los efectos que la música produce sobre nuestro cuerpo, tales como la regulación del tono muscular, la modificación del estado de ánimo, la estimulación de los procesos cognitivos, el desarrollo de habilidades sociales e integración social, etc.
En este sentido, el taller está dirigido no sólo a la experimentación de dichos beneficios, sino también a la interpretación de aquellas situaciones que, como expertos en salud, consideremos apropiadas para dar un uso terapéutico a nuestro ser musical.
Por: Antonio Serrano Belmonte.
A todas aquellas personas inscritas en el I Congreso Escuela de Pacientes y que hayan seleccionado el taller de musicoterapia, os pediría que me enviárais estos datos a mi correo ( a.serranobelmonte@yahoo.com.mx) para poder adaptar el taller a vuestro perfil.
¡Nos vemos el día 20 en Granada!
FICHA HISTORIA MUSICAL
1. IDENTIFICACIÓN
Nombre:
Edad:
¿Padeces algún tipo de enfermedad crónica?
2. PASADO
¿Sabes qué música escuchaba tu madre durante el embarazo?
¿Sabes si te cantaban canciones de cuna? ¿Cuáles?
¿Qué música preferías cuándo eras más joven?
¿Qué música no te gustaba?
¿Cuál era tu cantante o grupo musical favorito?
3. HISTORIA ACTUAL DEL USUARIO
¿Qué música prefieres en este momento de tu vida?
¿Qué música no te gusta?
¿Cuál es tu cantante o grupo musical preferido hoy día?
¿Qué sonidos prefieres?
¿Qué sonidos no te gustan?
¿Qué instrumentos musicales llaman tu atención?
No hay comentarios:
Publicar un comentario